EL CORAZÓN DEL FÚTBOL UNIVERSITARIO

Escrito por Hannah Boxerman

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El honor más alto en el fútbol universitario vive aquí mismo en St. Louis, a sólo unas manzanas de distancia de CITYPARK.

El Trofeo Hermann, un balón de fútbol de cristal brillante que pesa diez libras, es un honor que se otorga cada año a los mejores jugadores de fútbol universitario de la nación. Con sede en el Club Atlético de Missouri en la avenida Washington, el premio se otorga en el banquete anual del Trofeo Hermann del CAM.

Allí, los finalistas se unen a cientos de universitarios leales al fútbol universitario, miembros de la comunidad, fanáticos y leyendas del deporte, para recibir y quedar maravillados con el Trofeo Hermann del mundo del fútbol.

Las fuerzas del destino trajeron el Trofeo a St. Louis. En 1967, el presidente de la Liga Nacional de Fútbol Profesional (y nativo de St. Louis) Robert Hermann, estableció el premio como un reconocimiento anual al mejor jugador universitario masculino del deporte. El fallecido Hermann fue un prominente empresario local que trabajó incansablemente para contribuir al éxito del fútbol en los Estados Unidos. El premio femenino fue creado en 1991.

En 1986, el Club Atlético de Missouri, que tenía un legado de décadas celebrando logros atléticos sobresalientes, creó su propio premio de fútbol universitario. Ese premio CAM y el Trofeo Hermann se fusionaron oficialmente en 2001 para formar un honor definitivo: El más prestigioso del fútbol universitario.

El CAM continuó su tradición de honrar a los ganadores con un banquete de celebración, decidiendo además, ampliar la lista de invitados para incluir a todos los finalistas, representando a más universidades, invitando a los medios de comunicación y continuando la visión de Robert Hermann de elevar el fútbol en Estados Unidos.

Jim Wilson, Director de Comunicaciones del Club Atlético de Missouri, ha estado dirigiendo el Trofeo Hermann desde la fusión de 2001.

“El objetivo era darle al fútbol universitario un mayor escenario”, dijo. “La idea simplemente tenía sentido, St. Louis es la capital del fútbol en EE.UU. con una larga historia de fútbol. Y tenía sentido organizar el banquete de premios en un lugar de estreno como el CAM que honra el gran legado del Sr. Hermann y todas sus importantes contribuciones al deporte del fútbol”.

En las décadas que tiene existiendo, el Trofeo Hermann ha sido otorgado a jugadores ahora famosos, desde John Kerr, Al Trost y Alexi Lalas hasta Crystal Dunn, Tisha Venturini y Mia Hamm. Muchos de estos jugadores regresan al banquete del CAM para servir como oradores principales y codearse con la próxima generación de estrellas del fútbol. Para los homenajeados que asisten, que incluyen a los equipos campeones a nivel estatal de las escuelas secundarias de Missouri, es una oportunidad única en la vida para conocer a sus ídolos del fútbol.

“El año que Crystal Dunn de la Universidad del Norte de Carolina se lo ganó, Mia Hamm fue nuestra oradora destacada, también del Norte del Norte de Carolina”, dijo. “Crystal Dunn tuvo el honor de llevar el #19, que en el Norte de Carolina era el número de Mia Hamm. Es el mayor honor que se puede obtener jugando allí y en el banquete estuvo sentada junto a su héroe”.

Wilson describe el Trofeo Hermann del CAM como un punto de partida para las carreras de los jugadores universitarios de fútbol; pueden ir a ligas profesionales, jugar en los Juegos Olímpicos, o entrenar a un equipo de la NCAA. Estar allí para el comienzo de su éxito, dice él, es emocionante y gratificante.

“Estos son atletas jóvenes y sobresalientes, lo mejor de los juegos universitarios, pero aún no llaman la atención de los titulares nacionales”, dijo. “Los tenemos cuando apenas comienzan a ascender, no después de que alcanzan sus logros. Es Crystal Dunn antes de ser Crystal Dunn del equipo nacional; es emocionante haberlos honrado mientras van en ascenso. Nos encanta ser parte de la ola que los llevará al éxito futuro, y cualquier éxito futuro que tengan solo le añade al prestigio de nuestro premio. Para ellos, venir aquí y ser reconocidos a nivel nacional es un gran logro y es muy emocionante ser parte de eso y hacerlo a todo lujo”.

Como sanluiseño y amante del fútbol – siendo a la vez un ex jugador y entrenador del equipo del club de su hija – Wilson es un fiel creyente de que St. Louis es obviamente el lugar para la sede del Trofeo Hermann del CAM.

“Mucho de esto se remonta a la tradición del fútbol en St. Louis”, dijo Wilson. “La Universidad de St. Louis ha ganado más campeonatos – diez – que cualquier otro programa de fútbol universitario. Con el número de jugadores que ha producido St. Louis y toda la pasión que hay aquí dentro de la comunidad del fútbol, simplemente tenía sentido. Al igual que con el Trofeo Hermann y cómo trabajaron con el Downtown Athletic Club de Nueva York, estamos haciéndolo a nuestra manera aquí para el fútbol y elevándolo al nivel que se merece”.

Los copresidentes del Club Atlético de Fútbol de Missouri, Greg y Annie Beekman, están de acuerdo.

“Ninguna otra ciudad en el país tiene una cultura e historia futbolística tan bien establecida o más enriquecida, especialmente con respecto al fútbol aficionado y universitario, que St. Louis”, dijeron. “El hecho de que St. Louis ha sido el hogar del Trofeo Hermann desde 1967 es otra indicación de cómo nuestra ciudad ha estado celebrando y elevando el juego de fútbol en Estados Unidos mucho antes que en el resto del país”.

St. Louis siempre ha sido una sede para el fútbol, dice Wilson, citando al equipo de fútbol de Estados Unidos del 1950, reconocido por haber derrotado a Inglaterra mientras ostentaba una formación compuesta de múltiples sanluiseños. Eso fue lo que hizo de nuestra ciudad una ciudad de fútbol que merece atención, seguido por el creciente éxito de la Universidad de St. Louis, el nacimiento de los St. Louis Stars y la imponente presencia de Robert Hermann como presidente de la Liga Norteamericana de Fútbol. El fútbol femenino brilló aquí también; los equipos femeninos de primera generación jugaron en el Soccer Park en Fenton, y la segunda generación jugó en el Busch Stadium ante una multitud de 40,000 espectadores.

Siempre tuvo sentido. Pero ahora, la presencia de CITY eleva a la historia del fútbol en St. Louis–y el del Trofeo Hermann del CAM–a un nivel aún mayor.

“Respaldamos totalmente todo lo que CITY está haciendo”, dijo Wilson. “Va a elevar el perfil del Trofeo Hermann del CAM, aquí localmente y vamos a seguir colaborando con ellos y seguir construyendo esa relación. Además, tanto el Club Atlético de Missouri como CITY son socios del centro. Tiene total sentido. Hay tanto con lo que nos podemos alinear: apoyar el atletismo, apoyar el centro de St. Louis, apoyar a la comunidad empresarial. Hay muchas oportunidades de asociación y tanto CITY como el Trofeo Hermann del CAM van a seguir creciendo juntos”.

La relación ya está floreciendo. Los miembros de la organización de CITY, entre ellos el director deportivo Lutz Pfannenstiel y el presidente del equipo y gerente general Diego Gigliani, estuvieron presentes en el banquete del Trofeo Hermann de este año. El Trofeo Hermann también hizo el viaje hasta CITYPARK, donde aficionados de todas las edades se tomaron fotos con el premio y conocieron su historia. Y donde un aficionado muy especial de CITY hizo una aparición: La leyenda del fútbol Al Trost, quien ganó el Trofeo Hermann en 1969 y 1970.

Los Beekman dicen que el Trofeo Hermann ha contado con el apoyo de la organización de CITY desde el principio, incluyendo el compromiso de conocer la importancia del premio y la historia del fútbol en St. Louis.

“El hecho de que CITY hizo que el Trofeo Hermann fuera parte de la experiencia del día del juego para el partido de Kansas City y que continúe promoviendo el premio entre sus aficionados, es muestra de lo profundamente dedicada que está la organización en ver crecer y apoyar todos los aspectos del fútbol en St. Louis y lo apreciamos mucho”, dijeron. “Por nuestra parte, el Trofeo Hermann es administrado por la Fundación Deportiva del Club Atlético de Missouri y nuestros miembros sienten tanta pasión por apoyar el equipo de CITY como por ayudar a la comunidad de St. Louis. Esperamos poder trabajar con la organización de CITY y apoyar sus esfuerzos de alcance comunitario”.

Wilson dice que el futuro del fútbol en St. Louis se ve brillante – algo que el éxito de CITY dentro y fuera del campo ayuda en gran medida.

“CITY ha superado las expectativas y ha sido fenomenal”, dijo. “Nos emociona ver que la franquicia va bien y continúa creciendo y el CAM será parte de eso en cualquier manera que pueda. Un CAM vibrante ayuda a CITY, un CITY vibrante nos ayuda a nosotros. Nuestros objetivos están perfectamente alineados y tiene sentido que tengamos una asociación y la hagamos crecer”.

Los días de juego en el CAM son eléctricos; durante cada partido local, una multitud entusiasmada y bulliciosa llega al espacio de la Avenida Washington para aprovechar los autobuses que van al CITY Park.

Wilson dice que el CAM está muy entusiasmado por continuar la larga historia del club como destino para los fanáticos del fútbol y su equipo está disfrutando del aumento en popularidad del deporte en todo Estados Unidos.

“Nos corre por las venas”, dijo McPherson. “Solo queremos que el fútbol siga creciendo a nivel nacional. Cosas como el éxito de la MLS nos eleva. Tener eso aquí localmente, es enorme. A medida que crece la liga, nos ayuda a todos como plataforma de donde despegan las carreras de los jugadores. Estados Unidos será el anfitrión de la Copa Mundial en 2026, otro gran punto a favor del fútbol en Estados Unidos y simplemente queremos ser parte de todo eso. Queremos celebrar a estos grandes atletas y darles un escenario”.

Para obtener más información sobre el Trofeo Hermann del CAM, e información sobre el banquete del próximo año, visite a machermanntrophy.org.